¡AGOSTOOOOOOOOO!... ¿POR QUE TE FUISTE?

Hay algo que nos pasa a muchas, no sé si a todas, pero por lo menos si sé que a varias niñas y a mí nos has ha pasado que cuando estamos en vísperas de nuestro viaje nos da como guayabo irnos, es raro porque estamos supremamente felices y emocionadas por todo lo que se nos viene, por las nuevas experiencias, sabemos que vamos a conocer lugares geniales y ese tipo de cosas, pero al mismo tiempo nos da tristeza irnos y dejar gente, costumbres, nuestra vida en general…es una sensación muy difícil de explicar porque nos volvemos medio bipolares, podemos estar felices de la vida, al segundo nos entra la depre, luego nos ponemos felices otra vez y así sucesivamente, es una montaña rusa de emociones que solo van a entender cuando su fecha de viaje se acerque, y eso porque ni yo misma me entiendo a veces.

Con la mano en el corazón, siendo 100% sincera les digo que desde que termine mis pasantías (octubre) no he hecho absolutamente nada productivo, aparte de lo del proceso de Au Pair. Mi vida se reducía a estar en mi casa, porque casi no me gusta salir, estar en mi pc, chatear, ver anime (mucho anime), repasar ingles muy ocasionalmente, comer, dormir, ir al baño y ese tipo de cosas. Y por qué les digo esto, muy sencillo porque en ese momento yo lo único que pensaba era “para que voy a ponerme a hacer más cosas si ya casi me voy, quiero una HF rápido para poder irme en febrero o marzo”, yo me la pasaba pensando cosas así, pero las cosas se me dieron de otro modo y se dilataron hasta septiembre como se habrán dado cuenta. Uno se afana mucho, o por lo menos yo en mi interior estaba “quiero irme ya, quiero irme ya, quiero irme ya”, pero menos mal no me fui antes.

Algunas niñas en los grupos de face que yo frecuento, para darle ánimo e intentar llenar de paciencia a las niñas que aún no tienen HF, les dicen que tranquilas que el tiempo y los planes de Dios son perfectos, etc, etc. Yo no soy muy religiosa que digamos, pero tienen toda la razón al decir eso. Para mí, agosto de 2012 fue el mejor mes, aunque sentía que no tenía mucho tiempo para hacer todas las cosas que quería hacer antes de irme de Colombia, logre para sorpresa mía, hacer cosas que ni se me cruzaron por la cabeza y estoy muy feliz, así mi entrada anterior haya sido algo trágica y con rabia, si me pongo a pensar han sido muchísimos más los momentos felices que los momentos amargos. He pasado tiempo con mis amigos, con mi familia, me reencontré con una persona que la verdad no creí volver a ver, porque aunque tenía la intención de despedirme de él, no sé si a la larga hubiese sido capaz. Si me hubiera ido en marzo todo habría sido muy diferente y no me iría con recuerdos tan bonitos de Colombia, sí, tengo a mi familia, pero ustedes saben que les estoy hablando de otra cosa jajajaja.

Agosto se pasó volando, para mí normalmente es el mes que más despacio se pasa, pero este se fue muy rápido y es que me lo goce mucho y con gozármelo no me refiero a sexo, drogas y alcohol, NOOOO, pero como les dije fui muy feliz y es que las cosas buenas duran poco, momentos que quería que fueran eternos, ahora son pasado, son recuerdos, lindos recuerdos que me llevo en la mente y en el corazón.

Y una vez más aquí entra la dichosa montaña rusa de emociones: estoy feliz por llevarme esos lindos recuerdos conmigo, pero estoy triste porque ya no voy a poder abrazarlo ni besarlo… las niñas que se vayan dejando a su novio, prometido, amigo especial, arrocito en bajo, amante, lo que sea, me van a comprenderJ.

Se fue mi idílico agosto L.