UN AÑO DE AU PAIR EN ALEMANIA - parte 2

Resumamos las mejores y las “peores” cosas de mi año.

Lo bueno:

*Mis horas de trabajo con la niña pequeña no eran por lo general muchas, los lunes y los viernes salía del jardín a la 1:30 o 2 de la tarde, pero esos días la mamá estaba en la casa y de martes a jueves se estaba en el jardín hasta las 5 lo que significaba que mi trabajo con ella eran solo 2 horas al día.

*Aunque en si con mi niña grande el trabajo solo consistía en hacerle el almuerzo y ver que hiciera la tarea, a los papás les gusta ver que uno pasa tiempo con los niños y con ella la verdad cada segundo que pasaba era genial, ya fuera que tuviéramos planes o simplemente nos sentáramos a hablar o ver tv para mi simplemente pasar tiempo con ella no era trabajo.

*Yo creo que era más la niñera de los perros que de las propias niñas y no lo digo a modo de queja.

*Mi cuarto era el más grande de toda la casa y aunque quedaba en el sótano aun así tenía muy buena luz, mi baño era privado y ahí nadie me molestaba, si me preguntan es mil veces mejor vivir en el sótano que en al mismo piso donde los otros cuartos están, así nadie te despierta temprano los fines de semana.

*Tan pronto como inicie mi curso intensivo de alemán empecé a hacer amigos. En cuanto al precio debo decir que se me hacía costoso pero en todo el tiempo que ya llevo acá he cotizado otras escuelas y la verdad al comparar los costos ya hasta se me hace barato lo que pagué en esa época.

*Hice varios amigos con los que sigo teniendo contacto y los quiero mucho, yo no soy mucho de salir de fiesta pero en la ciudad donde estaba viviendo había un bar cubano al que solíamos ir de vez en cuando a bailar.

*Cuando llegue me dieron un Smartphone para mi uso durante el año y el día de mi cumpleaños se convirtió oficialmente en mi teléfono que me podía llevar conmigo al irme de la casa.

Ahora lo no tan bueno:

*Mi host dad no movía un dedo en la casa, lo único que él hacía era llevar y recoger a la niña del jardín y luego se iba, si por algún motivo a la mamá se le hacía tarde y él llegaba primero, entonces yo tenía que seguir trabajando hasta que la señora estuviera en la casa así ya hubiese cumplido con mi horario.

*Según mi contrato yo solo tenía que cocinar para las niñas, pero bien que el señor molestaba si luego la comida no alcanzaba para él. A mí la verdad me daba igual, la comida para ellos no estaba incluida en el acuerdo, si llegaba a cocinar algo que al final alcanzaba para todos bien, pero si no pues de malas.

*El internet estaba bloqueado de 8:00 am a 6:00pm de lunes a viernes y de 8:00 a 2:00 pm los sábados.

*La mamá de mi HD fue varias de “visita”, pero cada que quedaba duraba más de un mes en la casa, cuando iban los otros abuelitos me ayudaban y todo era súper relajado, pero con esta señora era como tener otro niño en la casa.

*Siempre que empezaba mi turno de trabajo la casa estaba echa patas arriba sin importar que yo la hubiese dejado impecable y súper organizada al terminar el día anterior y creo que toda au pair estará de acuerdo conmigo cuando digo que los lunes era el peor día, por suerte tenían una señora que iba una vez a la semana a limpiar, por lo general los jueves.

En sí creo que las cosas negativas eran cosa de mi HD y lo positivo corría por cuenta del resto de la familia. Aun así no puedo decir que el me caiga mal, si tuvimos roces un par de veces pero a fin de cuentas él es buena persona y nunca me faltó al respeto, ni él ni nadie de la familia. Mis vacaciones las organizamos de modo que nos conviniera a todos e incluso cuando me fui al terminar mi año me dieron dinero extra y un bolso con algo de comida para mis primeros días de niña independiente.